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La semana laboral de 4 horas
Acabo de terminar de leer «La semana laboral de 4 horas» (web oficial en inglés). Un libro de Tim Ferriss que explica cómo pasó de cobrar $40.000 al año trabajando 80 horas a trabajar solamente 4 horas a la semana ingresando $40.000 al mes.
El libro en general es muy interesante y divertido. He soltado bastantes carcajadas mientras lo leía. Pero en absoluto creo que sea un libro para tomar al pie de la letra. El autor afirma que es fácil hacer lo que él ha hecho. Personalmente lo dudo horrores. No es fácil. Pero tampoco es imposible. Y aunque de momento yo no planee reducir mi jornada laboral a 4 horas a la semana (ni mucho menos), sí que este libro me ha cambiado la forma de ver ciertos aspectos de la vida.
Para empezar es interesante cuestionarse la rutina de vida habitual del común de los mortales en los países occidentales. Se trabajan 40 horas a la semana y apenas se dedica tiempo a otras cosas. Realmente la mayor parte del tiempo no se está disfrutando de la vida. Y mucha gente trabaja más para ganar más, y no de forma puntual, sino in crescendo.
Trabajando fielmente ocho horas al día, con el tiempo llegarás a ser jefe y a trabajar doce horas al día.
ROBERT FROST, poeta norteamericano ganador de cuatro Premios Pulitzer
Tim, por su parte, lo que hace es aumentar y optimizar los ingresos. Ser más eficiente. En vez de trabajar más, trabajar menos, pero produciendo más. Su objetivo es poder dedicar la mayor parte de su tiempo a VIVIR, y se toma muy de vez en cuando minijubilaciones. Afirma que la filosofía de trabajar a destajo para disfrutar una jubilación al final de la vida carece totalmente de sentido, porque a esa edad es cuando menos puedes disfrutar de la vida. Y probablemente tiene razón.
Para trabajar menos produciendo más sigue varias reglas. Entre ellas:
- Ley de Parkinson, que afirma que «el trabajo se expande hasta llenar el tiempo disponible para que se termine». Es decir, si tienes que entregar un trabajo para la escuela en dos meses, lo terminarás en dos meses. Y si te lo encargan a realizar en un mes, lo harás en un mes. El autor afirma que el trabajo que se hace en las 8 horas laborables se podría hacer en menos, simplemente nos cuesta 8 horas porque queremos rellenar esas 8 horas.
- Principio de Pareto, o regla del 80-20. Quiere decir que con un 20% del esfuerzo conseguimos hacer el 80% del trabajo. Pero luego hay un 20% del trabajo que nos roba el 80% del tiempo. Lo que hace el autor es directamente eliminar ese trabajo que te roba el 80% del tiempo. Por ejemplo en su empresa se quitó de encima «malos» clientes, dejando a los «disciplinados» que no dan problemas. Tampoco acepta envíos internacionales, porque «por unos dólares» de beneficio tiene que perder tiempo rellenando papeles de aduanas.
- Eliminar distracciones: leer el correo electrónico lo menos posible (hasta solamente 2 veces a la semana, afirma), evitar interrupciones (teléfono, reuniones,..), etc.
- Delegar y subcontratar. En definitiva pagar a alguien para que se ocupe de tareas. Cambiar dinero por tiempo. El autor llega a tener toda su empresa totalmente subcontratada y su negocio totalmente automatizado. Tiene entre otras cosas una asistenta virtual en la India.
Según el autor una vez que se consigue optimizar el trabajo produciendo más en menos tiempo, lo siguiente es conseguir la libertad de movimiento: teletrabajo. Siendo emprendedor puede ser más fácil, pero da también consejos para trabajadores por cuenta ajena. No obstante hay trabajo que, obviamente, no permiten teletrabajo. Como por ejemplo cualquier trabajo que necesite atención al cliente. Y el autor se centra mucho en hacer negocio con empresas centradas en producto (no en servicios): así subcontrata la producción, distribución,…
Una vez conseguido haber reducido al mínimo la jornada laboral a través de la optimización y automatización, y después de conseguir la libertad de movimiento, es cuando según él ya sólo queda disfrutar plenamente de la vida. A partir de este punto habla varios capítulos de qué hacer y cómo: viajes, aprender idiomas, hospedarse por poco precio, etc. Una cosa que cabe preguntarse es: qué quieres hacer en tu vida. Ojo, no «qué quieres poseer». No pienses «quiero tener un Ferrari», sino mejor «quiero conducir un Ferrari».
Me ha gustado muchísimo este libro. En ocasiones es una fantasmada total. Pero ofrece un punto de vista muy interesante de la vida que hace reflexionar y replantearse ciertas cosas. Además la edición que yo he leído está plagada también de testimonios de gente que ha leído el libro. Son francamente muy interesantes.
Finalmente os dejo con una de las citas más divertidas:
El hombre medio es un conformista que acepta miserias y desastres con el estoicismo de una vaca plantada bajo la lluvia.
COLIN WILSON, escritor británico, autor de El disconforme; neoexistencialista.
Viaje a China: Beijing y Shanghai
Zhujiajiao, a 40 km de Shanghai
A finales de Octubre estuve viajando con mi amiga Andrea a China. Compramos un billete de avión con KLM por 400 € (precio final) de ida y vuelta a Shanghai. Unos amigos nos recomendaron Beijing porque es una ciudad más China. No se equivocaban, Shanghai nos demostró ser una ciudad más occidentalizada.
Quiero hacer una mini-guía de las cosas que aprendimos y que pueden ser de utilidad a personas que estén pensando viajar a China.
Idioma
Muy, muy poca gente habla inglés. De modo que es mejor llevar las cosas apuntadas en Chino (direcciones, palabras básicas, alguna frase,…). Sin embargo en muchos sitios (casi todos que vimos) los carteles y mensajes impresos estaban escritos tanto en chino como en inglés. Es recomendable intentar aprenderse o reconocer al menos el nombre de la ciudad donde estás en chino. Por ejemplo Beijing: 北京 o Shanghai: 上海. Así por ejemplo si vas a coger un tren sabrás donde va y de donde viene. Tienen un sistema curioso para las fechas. Un día es un sol y un mes es una luna. Sol se escribe 日 y luna se escribe 月. Año se escribe 年, y las fechas las escriben así: 1984年7月16日 (16 de Julio de 1984). También es importante saber decir «no, gracias» sobre todo a los vendedores ambulantes. Se escribe 不要 y se pronuncia búyào. «Gracias» se dice 谢谢 (pronunciado xiexie) y para saludar se usa 你好 (pronunciado nihao). Las transcripciones fonéticas las he escrito en pinyin.
Retretes
La gran mayoría de los retretes son agujeros en el suelo. Así que acostúmbrate porque en casi ningún sitio hay retretes con asiento. Hay muchos servicios públicos, de hecho vimos a gente que aparentemente no tenían servicios en sus casas ya que salían a la calle en pijama para ir al servicio público. También hay muchos locales que no tienen servicio para sus clientes (quizá sí para los empleados). Los servicios públicos están bien señalizados.
Dinero
La moneda se llama comunmente yuan (元) y oficialmente renminbi (abreviado RMB). El cambio euro-yuan es muy fácil: 10 yuanes = 1 euro. En teoría no puedes conseguir yuanes mas que dentro de China. No obstante lo que te cobran por cambiar o sacar dinero en China es una comisión muy muy baja. En cualquier cajero puedes sacar dinero (seleccionando la opción «withdrawal»). En general todo suele ser muy barato (una comida abundante te puede salir por 2 o 3 €). El café es caro, supongo que porque lo importan. Un café te puede salir por 20 yuanes (¡como una comida!).
Trámites para entrar al país
Los visados los tramitamos a través de visados.org. Bastante cómodo. De otra forma hay que ir a Barcelona o a Madrid hacer cola, etc. No tuvimos que vacunarnos de nada, aunque creo que había alguna vacuna «recomendada». En el avión de ida tuvimos que rellenar dos impresos: uno con datos personales, tiempo de estancia en el país, etc. y otro sobre nuestro estado de salud (si teníamos fiebre, congestión,…).
Medios de transporte
En China conducen de manera muy temeraria. Por ejemplo fuimos en un autobús que adelantaba en la autopista por el arcén. Para cruzar una calle lo mejor es que te pongas cerca de un chino y cruces con él. Los taxis son muy baratos: ir de un sitio a otro de la ciudad normalmente te costará menos de 20 yuanes. También puedes coger un isocarro y en Shanghai suele haber motoristas esperando en las salidas de metro u otros transportes y se ofrecen a llevarte a cualquier sitio.
Para ir de Shanghai a Beijing cogimos un tren de alta velocidad con literas. Son muy modernos. El tren que cogimos fue uno tipo D nocturno. Nos fue de utilidad esta información de trenes. El billete es mejor comprarlo con unos días de antelación ya que nosotros lo conseguimos in extremis al comprarlo de ida el mismo día.
Los metros de Beijing y Shanghai son muy modernos también y además son baratos (entre 2 y 4 yuanes cada viaje, es decir entre 20 y 40 céntimos de euro). En muchas estaciones de metro tienes que pasar controles de rayos X cada vez que entras.
Forma de vida
A los chinos parece importarles poco lo que ocurre a su alrededor. Verás a muchos chinos en la calle sin aparentemente hacer nada. Tendrás muchos empujones, codazos, etc. en las aglomeraciones, y si estás haciendo cola no dudarán en colarse. Sin embargo nuestra sensación es que son ciudades muy seguras con muy poca delincuencia. Algunas cosas que nos llamaron la atención es que muchos chinos van con botellitas de un líquido que aparentemente es agua con diversas cosas flotando en ella que van dejando sabor al agua que las rodea. Al principio tienen un aspecto un poco desagradable, pero enseguida te acostumbras a verlas. Otra cosa que podrá llamarte la atención es que los chinos escupen, y mucho, y cuanto más ruido hacen parece que les gusta más. A veces también se tiran pedos y no parece importarles. Hay que acostumbrarse también a otra cosa: los olores y la higiene. A veces había montañas de basura en la calle, sin bolsas, sin contenedor, sin nada, simplemente montañas de basura. Eso unido a las tiendas que sirven comida en plena calle provoca que por cualquier sitio por el que pases tengas que disfrutar intensos olores.
En resumen
Es un viaje fantástico con una cultura en muchas ocasiones muy diferente. Es fascinante viajar a sitios tan lejanos y diferentes. Lo recomiendo a todo aquel que no tema que en algún momento dado pueda encontrarse perdido sin poder preguntar a nadie sin saber muy bien qué hacer. Si eres capaz de moverte por tí mismo en esa situación, entonces adelante 🙂 Sino también puedes ir con una agencia de viajes, un guía, etc.
Fotos de lugares que visitamos
En Beijing entre otras cosas vimos:
El Templo del Cielo
La Gran Muralla
El Palacio de Verano
En Shanghai estuvimos en:
La zona financiera
Los jardines Yuyuan
Todas las fotos que hice con mi cámara están en este album de Flickr.
Marrakech
Un viaje maravilloso aprovechando las Fiestas del Pilar de Zaragoza.
Viaje a Luxemburgo
Este fin de semana he visitado a plunchete, que actualmente trabaja y reside en Luxemburgo.
Ha sido un fin de semana genial. ¡Gracias plunche por acogernos y por hacer de guía turístico! Hice unas cuantas fotos con mi cámara. Y Alba también hizo fotos. Como foto más curiosa me quedo con esta:
Más gente harta de la página web de renfe
También se hacen eco en La Pastilla Roja de lo pésima que es la página web de renfe. En este blog ya habé de ello y recibí bastentes comentarios de usuarios comentando sus desagradables experiencias personales aquí, y en meneame.net.
¿Cuándo va a arreglar renfe esta situación? La página sigue plagada meses después de errores de diseño, usabilidad y funcionamiento.
El efecto menéame
El otro día un usuario de menéame decidió publicar mi historia sobre lo pésima que es la página web de renfe. La historia pasó a portada y este fue el efecto que tuvo en las estadísticas: unas 2.000 visitas en 2 días.
Mucha gente ha comentado en la página de menéame y también mucha gente ha dejado constancia de sus opiniones y experiencias en este blog. ¡A ver si renfe espabila de una vez!
Reino Unido: ese país tan diferente
Hace una semana que volví de Londres. Estuve dos semanas allí con mi amiga Raquel. Reino Unido sin duda es un país singular. ¿Por qué? Pues por cosas que todos conocemos…
- Conducen por la izquierda.
- No utilizan euros, sino que utilizan libras esterlinas. Las monedas son muy curiosas: la moneda de 10 peniques es más grande que la de una libra.
- Tienen su propio sistema de unidades. Por ejemplo miden las distancias en pulgadas, pies, yardas, millas… Con las siguientes equivalencias: 1 pie = 12 pulgadas; 1 yarda = 3 pies; 1 milla = 1760 yardas,…
- Tienen un sistema jurídico diferente.
- Y, por supuesto, hablan otro idioma.
Ah! y están obsesionados con las cámaras de vigilancia
Viajes imposibles… o no
Hay un par de viajes de esos que se suele decir que quieres hacer «antes de morir». Los míos son estos…
- Bordear el mediterráneo en coche.
- Visitar las 7 nuevas maravillas del mundo… o todas las candidatas. El Taj Mahal, la ciudad de Petra, Machu Picchu, la Ópera de Sidney, la isla de Pascua,…
¿Cuáles son tus sitios que visitar antes de morir?
En los últimos diez meses
Me gusta viajar, sin duda. Estos son los vuelos que he cogido en los últimos diez meses:
Viaje a Nueva York
- Madrid (Barajas) – Nueva York (JFK)
- Nueva York (JFK) – Madrid (Barajas)
Viaje por Europa en el verano de 2006. Mis amigos empezaron mientras yo estaba en EEUU, yo les pillé en Amsterdam. Y me fui antes. Volví desde Berlín.
- Madrid (Barajas) – Ámsterdam
- Berlín – Barcelona
Viaje a la Oktoberfest de Munich. Vaya viaje más mal organizado 😛 porque Karlsruhe no es que esté precisamente cerca de Munich, y Gerona no está precisamente cerca de mi casa :P. Hubiera sido muchísimo mejor Barcelona – Munich. Bueno, de todas formas así visitamos varias ciudades por el camino, entre ellas Salzburgo en Austria.
- Gerona – Karlsruhe
- Karlsruhe – Gerona
Viaje a Halmstad (Suecia), visita erasmus.
- Zaragoza – Londres
- Londres – Malmo
- Malmo – Londres
- Londres – Zaragoza
Viaje a Dresden (Alemania), visita erasmus.
- Barcelona – Berlín
- Berlín – Barcelona
Viaje a Edinburgo (Escocia, Reino Unido), visita erasmus.
- Zaragoza – Londres
- Londres – Edinburgo
- Edinburgo – Londres
- Londres – Zaragoza
Viaje a Florencia (Italia), visita erasmus.
- Zaragoza – Roma
- Milán – Zaragoza
No es que me salga el dinero por las orejas. Es todo gracias a las compañías aéreas de vuelos baratos. Por ejemplo estos últimos vuelos a italia me ha costado ida y vuelta con todas las tasas: 50€. Absolutamente asequible.
Fascinación por la vida 