Política 2.0, elecciones 2.0

En plena campaña electoral me siento indeciso y no sé a quién voy a votar. Lo que sí que tengo claro es a quién no voy a votar. Tengo clarísimo qué partido no quiero que gane las elecciones ni en mi ciudad ni en mi Comunidad Autónoma. Eso me hace pensar en el voto en blanco, en el voto útil o en la abstención. No quiero abstenerme, tampoco quiero ejercer el voto útil porque así no estaré expresando lo que realmente pienso. Tampoco quiero votar en blanco porque no influye en la elección y no se tiene en cuenta.

Todo esto me hace pensar ¿qué tal si se pudiera votar negativamente a un partido? Cada ciudadano con derecho a voto podría tener un voto positivo y un voto negativo, por ejemplo. O alguna fórmula similar para poder votar negativamente a alguno de los candidatos. El reparto de escaños sería en función de los votos a favor menos los votos en contra. Acutalmente en elecciones generales el PP o el PSOE cuentan con unos 10 millones de votos cada uno. Imaginaos ahora que ahora obtuviesen 6 millones de votos positivos y 4 millones de votos negativos cada uno. Por una parte esto podría romper el bipartidismo actual (que dos partidos reciban casi todos los votos) y podría hacer que los políticos se dieran cuenta de lo lejos que están de la ciudadanía.

Vamos un poco más allá. Pensando en el estilo «web 2.0» imaginaos que podemos acompañar nuestro voto de un comentario. No sería viable que millones de personas pusieran sus comentarios fuesen tomados todos en cuenta, pero imaginaos que tenemos unas opciones predefinidas:

• (-1 voto) corruptos
• (-1 voto) mentirosos
• (-1 voto) fanáticos o extremistas
• (-1 voto) no me gustan un pelo
• (-1 voto) no se acercan a mi ideología
• (-1 voto) me han decepcionado
• (+1 voto) se acercan a mi ideología
• (+1 voto) han cumplido
• (+1 voto) me gustan
• (+1 voto) pragmáticos
• (+1 voto) sinceros
• (+1 voto) los menos malos
• (-1 voto) sin comentario
• (+1 voto) sin comentario

Son siete opciones que dan un voto favorable y siete opciones que dan un voto desfavorable. La decisión de qué opciones poner ya no sé cómo se podría tomar. Pero lo que quiero decir es que ya que se monta el tinglado de las elecciones, qué menos que poner unas cuantas casillas más. En vez de una hoja con la candidatura que se vota sería introducir esa hoja más otra hoja con estas opciones. Por ejemplo: hoja del partido X más la hoja de opinión con «-1 mentirosos». Así la ciudadanía tendría más capacidad para expresarse. Sería interesante ver el escrutiño: el 30% de los ciudadanos piensan que el partido X son unos mentirosos o corruptos. Así los partidos no «fardarían» de tener 10 millones de votos, sino que tendrían que agachar la cabeza porque por ejemplo 5 millones de personas piensen que son unos mentirosos y que votan «al otro partido» sólo porque ellos no salgan elegidos.

Bueno, después de esta divagación mental concluyo: lo de los comentarios igual es demasiado poco serio y polémico, pero lo de poder votar negativamente me parece fundamental.

En los últimos diez meses

 Me gusta viajar, sin duda. Estos son los vuelos que he cogido en los últimos diez meses:

Viaje a Nueva York

• Madrid (Barajas) – Nueva York (JFK)
• Nueva York (JFK) – Madrid (Barajas)

Viaje por Europa en el verano de 2006. Mis amigos empezaron mientras yo estaba en EEUU, yo les pillé en Amsterdam. Y me fui antes. Volví desde Berlín.

• Madrid (Barajas) – Ámsterdam
• Berlín – Barcelona

Viaje a la Oktoberfest de Munich. Vaya viaje más mal organizado 😛 porque Karlsruhe no es que esté precisamente cerca de Munich, y Gerona no está precisamente cerca de mi casa :P. Hubiera sido muchísimo mejor Barcelona – Munich. Bueno, de todas formas así visitamos varias ciudades por el camino, entre ellas Salzburgo en Austria.

• Gerona – Karlsruhe
• Karlsruhe – Gerona

Viaje a Halmstad (Suecia), visita erasmus.

• Zaragoza – Londres
• Londres – Malmo
• Malmo – Londres
• Londres – Zaragoza

Viaje a Dresden (Alemania), visita erasmus.

• Barcelona – Berlín
• Berlín – Barcelona

Viaje a Edinburgo (Escocia, Reino Unido), visita erasmus.

• Zaragoza – Londres
• Londres – Edinburgo
• Edinburgo – Londres
• Londres – Zaragoza

Viaje a Florencia (Italia), visita erasmus.

• Zaragoza – Roma
• Milán – Zaragoza

No es que me salga el dinero por las orejas. Es todo gracias a las compañías aéreas de vuelos baratos. Por ejemplo estos últimos vuelos a italia me ha costado ida y vuelta con todas las tasas: 50€. Absolutamente asequible.

Déjà vu

En los últimos días he tenido varios déjà vu (paramnesia). Durante mi vida me ha ocurrido muchísimas veces. Me ocurren por temporadas. Y parece que ahora estoy en una de esas temporadas. Algunas veces son breves, otras veces son muy largos.

Suelo tener la sensación de haber estado anteriormente en lugares. En una ocasión me ocurrió tener la sensación de haber estado anteriormente en un museo. Sentí reconocer al guardia de seguridad que era negro, alto y fuerte, situado a la izquierda del arco detector de metales. Bueno, hay muchos guardias de seguridad negros y por su profesión altos y fuertes. Y obviamente en los museos es frecuente encontrar un arco detector de metales. Pero sentí también que ya sabía cómo era el recibidor del museo, cómo se accedía a la zona donde estaba el guarda de seguridad, sentí que ya sabía que en el fondo de la recepción ya había visto esa enorme pared grisácea con letras grandes blancas. Vamos, durante unos veinte o treinta segundos sentí que todo lo que estaba viendo ya lo había visto antes. El otro día me pasó en Florencia. Sentí que ya había estado en un parque, reconocí el bar que estaba en frente del parque, la calle que lo rodeaba y el puente que había al otro lado para cruzar el río. Todos los detalles: situación de las cosas, aspecto, etc. encajaban perfectamente; allí ya había estado (eso es que lo que sentí). Es una sensación asombrosa.

Cuando me ocurren varios días seguidos, estos déjà vu suelen ir acompañados de «premoniciones». Me suele ocurrir que pienso en algo, normalmente algo nada trascendente, y al cabo de unas horas o pocos días ocurren cosas íntimamente relacionadas con ese pensamiento. Por ejemplo esta mañana he pensado, en un anuncio en el que aparecía Salvador Dalí. Un compañero me ha dicho «el envoltorio es importante» refiriéndose a la imagen que ofrecen marcas y productos. Automáticamente he pensado en un breve reportaje que vi de Salvador Dalí. Era un hombre que explotaba al máximo su imagen, y llegó a protagonizar anuncios de televisión. Concretamente me he acordado de un anuncio de unas líneas aéreas estadounidenses. Bueno, pues resulta que hace cinco minutos mi lector de RSS apuntaba a esta noticia: Salvador Dalí en comerciales de TV. Es una chorrada pero no deja de ser curioso. Para más detalles el anuncio en el que he pensado no sale en el vídeo al que se enlaza.

La «premonición» más clara que he tenido fue un sueño. En el sueño Dios aparecía (en forma de nube y voz grave) y me daba una biblia para que la leyese. La biblia estaba en hebreo, y le decía a Dios que no sabía leerla y le preguntaba qué parte debía leer. Entonces Dios me señalaba con su mano que salía de la nube. Me indicaba claramente dos palabras: Van Halen. Tras esto desperté. Vaya sueño absurdo y surrealista, pensé (soy ateo). Como de costumbre encendí mi portátil nada vez despertarme y fui a uno de los foros que frecuento. Y entonces ocurrió la gran casualidad: el nick del autor del último tema del foro era: Van Halen. Imaginaos mi cara de asombro. Sueño con Dios, me dice que lea la biblia, concretamente dos palabras: Van Halen. Me despierto y lo primero que leo es el título de un post en un foro en el cual el nick del autor es Van Halen. Pffff, que surrealista. Hasta ese día ni si quiera sabía que Van Halen era una grupo de rock americano.

A parte de estas «premoniciones» suelo tener otras muy curiosas. Por ejemplo durante todo un año solía «adivinar» los capítulos de los Simpson que iban a emitir al día siguiente. Una vez subía en el ascensor de mi casa pensando en una secuencia de un episodio y nada más entrar en el salón vi el televisor y estaban emitiendo esa misma secuencia de ese mismo episodio. Otra anécdota curiosa es que esta mañana he pensado en unas patatas fritas que me gustan y que no habré comido más que dos o tres veces en mi vida. Son unas patatas fritas onduladas típicas de bolsa. Pero son unas muy especiales: sus ondulaciones son muy grandes; especialmente grandes. Pues bien, ¡tan sólo dos horas después una amiga me ha sorprendido ofreciéndome esas mismas patatas fritas!

No creo en que tenga una capacidad sobrenatural ni un don ni nada por el estilo. No creo en Dios, no creo en casi nada que no pueda ver o palpar. Esta paramnesia y estas «premoniciones» no dejan de ser una curiosidad en mi vida. Pero una curiosidad fascinante que se repite por temporadas. Hacía más de un año que no me ocurría.